Una vez finalizadas las Fiestas de San Mateo 2010 en Cuenca, la Presidenta de la Asociación de Peñas Mateas, Maribel Gil Culebradas, ha querido hacer un balance de las mismas. En lineas generales "todo ha salido muy bien aunque debemos destacar el retraso sufrido en el Desfile Inaugural de Peñas al llegar a la Plaza Mayor por falta de organización". Y es que las peñas llegaban a este lugar con casi 35 minutos de retraso, cuando el reloj daba las 18:05 horas, momento en el que el Pregonero se asomaba al balcón para anunciar el comienzo de las Fiestas. "Las peñas subimos a la Plaza Mayor casi por inercia, porque sabemos lo que debemois hacer, pero al pasar Los Arcos del Ayuntamiento no había nadie que nos ubicara al final de la Plaza para dejar paso al resto de las peñas por lo que muchas se quedaron demasiado tiempo en la Anteplaza sin llegar a avanzar lo suficiente". Este será un aspecto a mejorar de cara a las próximas Fiestas Mateas.
Por otro lado, el resto de actos se saldaron con una numerosa participación, sobre todo durante el fin de semana. "Todos los lugares ocupados por las peñas estaban repletos de peñistas y resto de personal que acudía allí a degustar unn vaso de zurra o un trozo de bocadillo. Las peñas han vuelto a demostrar su lado más acogedor con el forastero para que se sienta como uno más y a buen seguro que la gente así lo ha percibido". En cuanto a los actos oficiales del Pendón Real, también ha habido una alta participación y "la presencia del Rey Alfonso VIII acompañado de su séquito le ha dado un realce sin igual a las Fiestas de este año".
Respecto a las vaquillas manifiesta que "según lo que me han comentado los corredores, las vacas han dado muy buen juego y no ha habido incidentes que lamentar, por lo que desde aquí debemos felicitar a los ganaderos por el buen resultado de su ganado, y felicitar a todo el personal encargado de las vacas por el cuidado y mimo que ponen en su difícil tarea todos los días".
Maribel tampoco ha dejado de valorar las actividades dirigidas a los más pequeños con la recuperación de los Juegos Populares y el asentamiento de la las vaquillas infantiles. La oscura mañana del sábado parecía que iba a aguar la fiesta pero, poco a poco, los niños se iban acercando a la Plaza de Ronda para "participar en la Cucaña, las carreras de sacos, el pañuelo, y algunos juegos infantiles de toda la vida que les hicieron pasar un rato muy divertido". Ya el domingo, los niños pudieron correr delante de esas reses preparadas para ellos demostrando sus buenas condiciones para sortear las embestidas e iniciándose en este festejo popular.
En definitiva, la APM está bastante contenta aunque advierte que "no debemos bajar la guardia y seguir trabajando para corregir los errores que se hayan cometido este año y mejorar estas Fiestas en la medida de lo posible para que sigan teniendo la aceptación que merecen".
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